El derrame pleural es una afección médica en la que se acumula líquido en el espacio pleural, la cavidad existente entre las membranas que recubren los pulmones y la pared torácica. Puede ser causado por diversas enfermedades y trastornos, como infecciones, enfermedades cardíacas, cáncer y traumatismos.
En España, en 2021, se registraron aproximadamente 32.760 casos, lo que supuso un ligero incremento con respecto al dato registrado el año anterior, con 22.470 casos, según Statista.
- Los síntomas del derrame pleural pueden variar según la cantidad de líquido acumulado y la causa subyacente. Algunos de ellos son:
- Dolor torácico: Puede experimentarse un dolor sordo o punzante en el pecho, que a menudo empeora con la respiración profunda o la tos.
- Sensación de plenitud en el pecho: La acumulación de líquido puede hacer que sientas una sensación de plenitud en el pecho.
- Dificultad para respirar: La acumulación de líquido en el espacio pleural puede comprimir los pulmones, lo que dificulta la expansión pulmonar completa y puede llevar a la dificultad para respirar, especialmente al hacer ejercicio o acostarse.
- Tos: Algunas personas con derrame pleural pueden experimentar tos, que a menudo es seca.
Dependiendo de la causa subyacente del derrame pleural, es posible que también se experimenten otros síntomas, como fiebre, escalofríos, fatiga, pérdida de peso inexplicada o síntomas relacionados con la enfermedad subyacente, como, por ejemplo, dolor abdominal si la causa es una enfermedad hepática.
La importancia de encontrar posibles causas subyacentes del derrame pleural
Es importante señalar que la presencia de un derrame pleural puede estar relacionada con una variedad de condiciones médicas subyacentes, como infecciones, enfermedades pulmonares, enfermedades cardíacas, trastornos renales, cáncer, traumatismos o embolias pulmonares, entre otros.
Por lo tanto, es fundamental consultar a un profesional de la salud si experimentas síntomas de derrame pleural para que puedas recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados para la causa subyacente. El tratamiento del derrame pleural, generalmente, se enfoca en tratar la causa subyacente y puede incluir drenaje del líquido acumulado, medicamentos y otros enfoques terapéuticos según sea necesario.
Colaboración multidisciplinaria para el abordaje y tratamiento del derrame pleural
Los cirujanos torácicos son los especialistas médicos que se dedican al diagnóstico y tratamiento de enfermedades y trastornos que afectan el tórax, entre los que se incluye el derrame pleural. Su enfoque es proporcionar opciones de tratamiento quirúrgico cuando sea necesario y trabajar en estrecha colaboración con otros profesionales de la salud, como los radiólogos a la hora de realizar el diagnóstico y controlar la evolución de la pleura; los oncólogos para tratar el derrame pleural relacionado con el cáncer; o los neumólogos para gestionar las afecciones pulmonares subyacentes.
Para ello, emplean una amplia variedad de técnicas, como la radiografía de tórax, la ecografía, la tomografía computarizada (TC) y la toracoscopia, para evaluar la cantidad de líquido presente, determinar la causa subyacente y guiar el tratamiento.
El tratamiento del derrame pleural puede variar según la causa y la gravedad de la afección. Los cirujanos torácicos pueden realizar procedimientos para drenar el líquido acumulado, como la toracocentesis o la colocación de un drenaje pleural. Además, en casos de derrame pleural recurrente o complicaciones, pueden llevar a cabo cirugías más invasivas, como la pleurodesis o la decorticación pulmonar, para prevenir la recurrencia.