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Cada año, aproximadamente 15 millones de bebés nacen de manera prematura en el mundo antes de las 37 semanas de gestación. Estos pequeños enfrentan desafíos importantes desde que llegan al mundo ya que sus cuerpos aún no están completamente preparados para la vida fuera del útero. Por ello, como cada 17 de noviembre, el día mundial del niño prematuro, es importante reflexionar sobre lo que significa nacer antes de la fecha prevista y cómo métodos como el canguro están cambiando el panorama del cuidado neonatal.

¿Qué pasa cuando un bebé nace antes de tiempo?

Un nacimiento prematuro ocurre cuando el bebé llega al mundo antes de completar su desarrollo dentro del vientre materno. Dependiendo de cuán prematuro sea, los desafíos que enfrenta pueden variar, siendo los más comunes los problemas respiratorios, dificultades para mantener la temperatura corporal, infecciones y un sistema inmunológico débil. Además, los órganos, como los pulmones y el cerebro, no están completamente formados, lo que puede generar complicaciones que requieren atención médica inmediata y especializada.

Muchos bebés prematuros pasan semanas o, incluso meses, en una unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), donde reciben cuidados que van desde soporte respiratorio hasta alimentación por sondas. Cada día cuenta, y el enfoque está en ayudar al bebé a ganar peso, madurar sus órganos y estabilizarse para poder irse a casa.

El impacto emocional y físico en las familias

El nacimiento prematuro no solo afecta al bebé, sino que también tiene un fuerte impacto emocional y físico en los padres y el entorno familiar. La incertidumbre, el miedo y la ansiedad suelen estar presentes en los primeros días, semanas o incluso meses de vida del bebé. Sin embargo, los avances en la atención médica neonatal han permitido que la gran mayoría de los bebés prematuros sobrevivan y tengan una calidad de vida plena a largo plazo.

El método canguro: un abrazo que salva vidas

Uno de los métodos más revolucionarios y efectivos para mejorar la calidad de vida de los bebés prematuros es el método canguro, también conocido como "cuidado canguro". Está basado en el contacto piel con piel entre el bebé y sus padres, principalmente la madre, durante largos periodos de tiempo. Este contacto directo no solo ayuda a regular la temperatura del bebé y a mejorar la estabilidad respiratoria, sino que también favorece el vínculo emocional entre los padres y el recién nacido.

El método canguro ha demostrado tener múltiples beneficios como:

  • Mejor regulación de la temperatura corporal: los bebés prematuros tienen dificultades para mantener una temperatura estable, por ello el contacto piel con piel con la madre les ayuda a regular su temperatura de manera natural.
  • Mejora en la alimentación: los neonatos que reciben el método canguro tienen más probabilidades de amamantar con éxito ya que el contacto cercano estimula la producción de leche y facilita la lactancia.
  • Estabilidad cardiorrespiratoria: el método canguro contribuye a que los bebés tengan menos episodios de apnea (pausas en la respiración) y a que sus ritmos cardíacos se estabilicen.
  • Reducción del estrés y del dolor: el contacto piel con piel también reduce los niveles de estrés del bebé, y se ha comprobado que ayuda a aliviar el dolor que pueden experimentar durante procedimientos médicos.
  • Vínculo emocional más fuerte: para los padres, poder estar en contacto directo con su bebé, a pesar de las barreras físicas que puede imponer una UCIN, es esencial para crear un vínculo afectivo sólido desde los primeros días de vida.
Un cambio en el enfoque del cuidado neonatal

En muchos hospitales, el método canguro se ha convertido en una práctica estándar. En lugar de separar a los bebés de sus padres durante largos periodos, se promueve un enfoque de cuidado conjunto, donde los padres son parte integral del proceso de recuperación de sus hijos. Esta cercanía no solo favorece al bebé, sino que también ayuda a reducir los niveles de ansiedad y estrés en los padres, fortaleciendo su capacidad de afrontar los retos que supone tener un hijo prematuro.

La importancia de la concienciación

El día mundial del niño prematuro nos recuerda la importancia de generar conciencia sobre los retos que enfrentan los neonatos y la necesidad de seguir invirtiendo en investigaciones y recursos para mejorar sus oportunidades de supervivencia. Además, se debe resaltar el papel fundamental de los padres en el cuidado de estos pequeños, así como la importancia de brindarles apoyo emocional y psicológico durante esta etapa tan delicada.